miércoles, 9 de julio de 2014

Patrimonio Recuperado, Imagen de la Virgen de la Aliaga.

La imagen recuperada además de sus propias cualidades plásticas es un testimonio de la piedad y fe religiosa de la época en que fue realizada. En una sociedad inspirada por un profundo sentimiento religioso, la imaginería sacra alcanzó una gran difusión, pues era un medio que fomentaba la oración y el fervor a Dios.

La escultura esta tallada en piedra arenisca, y representa la Virgen de la Aliaga. Originalmente estuvo situada en la hornacina de la fachada de la Ermita. Realizada por un autor anónimo en la segunda mitad del siglo XVIII. 


Imagen de la Virgen de la Aliaga

Esta espléndida escultura muestra a la Virgen sentada en una silla y al Niño en sus rodillas. Una estampa familiar de piedad cristiana. La Virgen está representada aquí como Madre de Dios, entronizada y sedente, con aspecto de figura humana y maternal, acompañada del Niño. La Virgen, que mira al frente, al igual que el Niño, lleva indumentaria de pesados paños. El manto cae por los hombros y cubre las piernas. Viste túnica larga formada por pliegues verticales dispuestos con regularidad y por la que asoman ligeramente los pies. La virgen sujeta al Niño con su mano izquierda, al que toma por el muslo, gesto de ternura que subraya el vinculo madre e hijo. Por su parte, el Niño sujeta un libro. En cuanto a la silla, es de brazos rectos y se levanta sobre una aliaga.


            Fachada del Santuario de Nuestra Señora de la Aliaga

El principal deterioro que sufrió la escultura fue su mutilación como resultado de la agresión recibida en la Guerra Civil. Fue derribada de la hornacina de la fachada, perdiéndose la cabeza de la Virgen y la figura del Niño por completo. Desde entonces la hornacina permanece vacía, y la escultura tras años de abandono en la "Casa del Santero" hoy podemos verla en el interior del Santuario.



Portada con la hornacina vacía

La actual imagen de la Virgen de la Aliaga que preside el Camarín del Altar Mayor del Santuario se inspiraría en esta escultura de piedra de la fachada. 



Conservándose el setenta y cinco por ciento de la pieza original, la escultura debería ser restaurada y repuesta al lugar para el que fue creada. La imagen de la Virgen de la Aliaga tallada en piedra debe volver a presidir la fachada de la Ermita. No queda nada de la estatua que representaba el milagro del cristiano cautivo en Argel y que también estaba en la hornacina de la portada.